jueves, 11 de junio de 2009

DRAMÓN

Sabía que era puro melo-drama... pero daba igual, porke siempre viene bien pegarse un dramón frente a gente q uno no conoce... y si se tiene suerte, JAMÁS se conocerá.




De repente, se me cerraron los ojos, me temblaron las piernas... me tape la cara y pensé que me iba a caer. No podía ver nada, ni metafóricamente hablando ni de manera real, porke lloraba tanto que veía todo nublado. Me apoyé en una pared... con dolor en el alma... si es que es verdad que el alma duele a veces. Y no de una forma literaria-romanticona, no, el alma duele, física y concretamente y yo ahí la sentía.

Me tuve que sentar, sentía muchos ojos encima míos... esas cosas también se sienten... sentía la mirada de reojo de un gordito chofer de radiotaxis, que no sabía si hablarme o no... y yo no sabía si quería que me hablara o no. Me senté... y me tapé la cara. Me mojé las dos manos, tanto gracias a los ojos como a la nariz... puse una canción "ad-hok" al momento, claro, si iba a llorar... siempre es interesante hacerlo con alguna banda sonora que de énfasis al momento. Me sake el abrigo, me tapé la cabeza... y lloré casi hasta llegar al grito-orgasmo. Si, tuve mi climax.

A ratos, me calmaba un poco y pensaba que rollos se pasaría la gente... que tan terrible pudo haberme ocurrido, que tan trágico, tan penoso, tan doloroso... y cualkier cosa que dijera, me daba la impresión que sería pequeña en comparación al dramón tormentoso que me estaba pegando... menos mal nadie preguntó.

Caminé un poco, me conseguí un cigarro... me extrañó que aquel cabro no me diera la cajetilla entera de pura lástima, pero a cambio de eso dijo: nada es tan terrible... y se rió.

En realidad... nada es tan terrible como para suicidarse, pero si terrible como para llorar por las calles botando angustia frente a ojos desconocidos... ese es un lujo.
La situación era terrible como para detenerse en la vereda y gritar : CON-CHE-SU-MAAAAAA-REEEEEEEEEE.... era terrible como para pegarle un combo a la pared y decir : AAAHHH!!!! ... era terrible como para patear una botella y llorando gritar: POR LA CHUCHAAAAAAAAA...
pero no era terrible como para tomarse una caja de pastillas o lanzarse de un piso mas arriba del segundo.

En el fondo, era una webada de momento que si bien, fué eliminada oportunamente, pudo haberse kedado allí y haberle dado un tinte depresivo a mi vida... pero...
Solo alcanzó para "dramón".

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es bueno llorar, hace bien.
Espero aquel dramón haya pasado ya.

Cariños

nolo dijo...

Hola que tal me gusto tu blog la verdad llege de error a el pero me a gustado lo que hasta el momento eh leido, creo que seguire leyendo un poco mas en estos dias ok te envio un saludo desde mexico.

Don Buho dijo...

Waaa!! Menos mal! Esos son lujitos que uno puede pegarse de perrente. Cuando es necesario. Soltar el bicho que carcome, dejar que brote, salga y se vaya a la chucha!! Es bueno, hace bien, nos hace estar un poco mejores cuando el bicho que carcome decide irse un rato... hasta que se atreve a volver...